Serio, trabajador, rápido, concentrado, letal...Son alguno de los calificativos que podemos otorgar a este Real Madrid. Si durante la temporada venia haciendo alarde de estas características, ayer en el Camp Nou no iba a cambiar el discurso.El equipo saltó al campo con las ideas muy claras, estar muy juntos, presionar todos para que los culés no se sintieran cómodos en ningún momento y robar para salir rápido al ataque.. Cada intentona del Barça quedaba dilapidada por el muro defensivo madridista, mención especial a Pepe y Cannavaro. Cierto es que Rijkaard ayudó al deshubicar a Iniesta en la derecha, y al concederle la titularidad a Ronaldinho, una sombra, mas gorda, del jugador que hizo ponerse de pie al Bernabeu.
El partido transcurrió como quiso el Madrid, y mas cuando en el minuto 36, un brasileño con nombre de emperador, apodado La Bestia, trenzó una pared aérea con Van Nistelrooy, y colocó el balón cerca de la escuadra izquierda de Víctor Valdes.
En ese momento el partido quedaba sentenciado, el Madrid no se desordenó en ningún momento, y pudo ampliar la cuenta si hubiese tenido mas valentía para irse al ataque. Me gusta este equipo, me gusta su juventud, la fe que tiene en si mismo, el hambre que desprenden sus jugadores, y sobre todo me gusta la capacidad de mejora que tiene, no me quiero equivocar, pero auguro unos buenos años para el madridismo.
El Barça se intentaba mantener aflote de la mano de Iniesta, su mejor jugador junto con el ausente Messi, pero era demasiado para el de Albacete, quizás Rijkaard debería haber sacado antes a Bojan y a Giovanni, para inyectar una dosis de movilidad y ganas al equipo. El Barça está sufriendo su desgalactización particular y parece que los altos cargos del equipo no se dan cuenta, con lo cercano que queda la época de Florentino...
Lo peor para los afcionados blaugranas en la noche de ayer, no fue que su equipo quiso y no pudo ante el terno rival, sino que muchos de los jugadores que han desplegado el mejor fútbol de los últimos 3 años, parecían no querer...
